¿Están lo suficientemente reconocidas las Hermandades de Gloria en la actualidad?
Esta semana el Consejo General de Hermandades y Cofradías de Sevilla ha nombrado al pregonero y a la Virgen que presidirá el Pregón de las Glorias de Sevilla del próximo año, recayendo tal honor en la persona de José Antonio Rodríguez Benitez y en la Virgen de las Mercedes de la Puerta Real. Esta decisión nos ha hecho reflexionar sobre el estado actual de este tipo de Hermandades. Queremos saber de los oyentes de "Cingulo y Esparto", su pensamiento sobre la siguiente cuestión relacionada con esta temática ¿ Están lo suficientemente reconocidas las Hermandades de Gloria en la actualidad?. Esperamos vuestras opiniones.
posted by romera @ 10:40 AM
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Estan muy reconocidas. Hace pocos años, las veiamos casi en familia.
Ahora en algunos sitios hay hasta bulla como paso en Todos los Santos o el Amparo.
Las hermandades de gloria están viviendo un momento de esplendor. Están creciendo cuantitavemente y a su vez está experimentando un gran salto cualitativo.
Puedo citar el caso de Madre de Dios del Rosario a su paso por la Calle San Jacinto, por momentos me vinieron a la mente imágenes de un Domingo de Ramos soleado y la explosión de júbilo que produce la Virgen de la Estrella en su transitar por las calles del barrio.
Las hermandades de gloria han dejado de ser ese dulce que nos quitaba a los cofrades el sabor amargo de una Semana Santa que pasaba casi de puntillas por nuestras vidas y han pasado a brillar con luz propia en la constelación de la Sevilla cofrade.
Hace no muchos años las procesiones de gloria suponían lugar obligado de encuentro de los hartibles cofrades y de cuatro amigos, hoy en día y como fruto de un trabajo bien hecho, se han ganado el interés y el reconocimiento del pueblo de Sevilla.
Las hermandades de gloria están en un buen momento, eso es indudable y de una certeza absoluta.
Eso sí, en comparación con años pretéritos del siglo pasado, porque como todos sabemos, en siglos anteriores (ss. XVIII y XIX) las hermandades de gloria fueron las más influyentes en el panorama católico del momento.
En fin, dentro de la corriente generalizada de anticatolocismo y laicismo imperante, las glorias son un oasis de religiosidad popular alejadas de las frivolidades en las que a veces caen las de penitencia.
Las procesiones de gloria suponen el punto y seguido, y a su vez son preludio de nuestra Semana Grande.
Son contraste armonioso de alegría desbordada y fervor sincero.
No todo se queda en un día, durante todo el año la participación de los hermanos en la vida de la hermandad y en los distintos cultos es notable.
La Sevilla mariana y cofrade, como no podía ser de otra manera, tiene un lugar en su corazón para estas pequeñas agrupaciones de fe.
La elección de José Antonio Rodríguez como pregonero de las Glorias de Sevilla es fiel reflejo del rejuvenecimiento que están experimentando estas hermandades, que se han ganado el respeto y la aprobación de todos. Atrás quedaron años donde negamos el pan y la sal a estas verdaderas manifestaciones de religiosidad popular.
Sí y no. Sí es verdad que estan mejor que en años anteriores y son más seguidas por el público que acude fiel a la cita. Pero no le tenemos la consideración que en verdad se merecen. Simplemente se las considera como puentes que nos hacen más llevadera la espera desde la resurrección a las palmas y ramos. Y no le damos el valor que realmente tienen. El de salvaguardar la fe y la devoción mariana, seña y bandera de esta tierra, en la intimidad y la sencillez de las cosas hechas con cariño y con mimo. Un saludo a mi buen amigo Paco.
Creo que todavía no están recibiendo el reconocimiento que se merecen, para muchos continúan siendo imágenes que salen un día a la calle y poco más.
Las hermandades de gloria han conseguido ganarse el apoyo y el ánimo del Consejo de Cofradías y de las hermandades de penitencia.
A nivel interno han poteciando sus actos religiosos y su grupo de jóvenes es más numeroso y participativo.
En lo que respecta a las procesiones cada año están mejor organizadas y con una mayor afluencia de público.
Las imágenes de gloria, hasta hoy el secreto mejor guardado de los barrios de Sevilla, han dejado de ser "patrimonio visual" de unos pocos y han pasado a ser citas de obligado cumplimiento para los amantes de las representaciones litúrgicas en las calles de la ciudad que mayor honra ofrece a María.
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